domingo, 26 de junio de 2011

cielo interior

dos de la mañana: golpe bajo
entonces la noche cae, lenta,
vencida por el enorme peso
de montones de recuerdos
que yacen bajo su manto

se liberan, a lo largo del cielo,
como nubes, grises y deformes,
que se ocultan entre sí,
una vez más distantes,
dos veces menos olvidadas

por cada ventarrón, la noche gime,
retuerce sus nubes, como tripas,
patea el aire, sin tregua, sin fondo:
a este cielo le hacen falta estrellas,
y a esta noche, escrúpulos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario